Add parallel Print Page Options

19 Nadie hay tan ciego ni tan sordo
como mi siervo, mi enviado,
nadie tan ciego ni tan sordo
como mi mensajero, el siervo del Señor.
20 Ha visto muchas cosas, pero no se fija en ellas;
puede oír, pero no escucha nada.
21 El Señor, por ser un Dios que salva,
quiso hacer grande y gloriosa su enseñanza;

Read full chapter